Cuando los analistas hablan, el mercado suele cambiar de rumbo, en subida o en picada. Infinidad de expertos que trabajan para las firmas de corretaje estadounidenses no pierden pie ni pisada a las miles de compañías cuyas acciones se cotizan en las bolsas. Sus evaluaciones suelen ser una señal de advertencia para los inversionistas . Ningún analista es infalible. Pero algunos, muchas veces en dependencia del renombre de la firma para la que trabajan, ejercen gran influencia sobre la variación que pueden experimentar las acciones sometidas a escrutinio. De modo que sus pronunciamientos pueden hacer subir o bajar los precios casi instantáneamente.
Se define como accidente (del latín accĭdens, -entis), como un suceso no planeado y no deseado que provoca un daño, lesión u otra incidencia negativa sobre un objeto o sujeto. Para tomar esta definición, se debe entender que los daños se dividen en accidentales e intencionales (o dolosos y culposos). El accidente es la consecuencia de una negligencia al tomar en cuenta los factores de riesgo o las posibles consecuencias de una acción tomada.