De acuerdo con sus causas, efectos y el crecimiento que tiene en el tiempo durante un año promedio, la inflación se clasifica en tres tipos: Moderada: Los precios aumentan de forma lenta por debajo de 10 %, por lo que los consumidores se sienten tranquilos al percibir que los precios son relativamente estables. Este tipo de inflación se da porque al haber más utilidad de dinero, las personas demandan más bienes y servicios, lo que hace que las empresas aumenten sus precios de forma baja. Galopante: Los precios aumentan en un porcentaje de dos a tres dígitos (de 10 a 100 %) en un año. Como en esta situación el dinero pierde valor, los consumidores tienden a adquirir estrictamente lo necesario para subsistir y las empresas sólo realizan inversiones de corto plazo. Se da principalmente porque los bienes y servicios se comienzan a vender a precios que la mayoría de las personas no pueden pagar, lo que reduce sus utilidades.
Se define como accidente (del latín accĭdens, -entis), como un suceso no planeado y no deseado que provoca un daño, lesión u otra incidencia negativa sobre un objeto o sujeto. Para tomar esta definición, se debe entender que los daños se dividen en accidentales e intencionales (o dolosos y culposos). El accidente es la consecuencia de una negligencia al tomar en cuenta los factores de riesgo o las posibles consecuencias de una acción tomada.