En marketing digital, entender cómo aparecen las páginas en una búsqueda, ayuda a aprovechar al máximo tus esfuerzos. En esta publicación profundizaremos en la clasificación de los resultados en las páginas de resultados de motores de búsqueda (SERP). Veremos cinco factores clave: el significado de la consulta, la relevancia de las páginas web, la calidad del contenido, la usabilidad de las páginas web y el contexto general y configuración de usuario/a. Considera estos factores clave como conceptos. Verás que se pueden aplicar de distintas maneras.
Crear contenido para posicionarse bien en las SERP suele interpretarse de varias formas. Por ejemplo, ¿Cuánta información debes escribir sobre un tema y cómo debes organizarla? ¿El público prefiere contenido con fotos o videos? Piensa en estos factores clave desde la perspectiva de un motor de búsqueda, para entender qué toma en cuenta el algoritmo al clasificar los sitios web.
El primer factor es el significado de la consulta. La consulta son las palabras escritas en la barra de búsqueda de Google. Para obtener resultados relevantes, el algoritmo necesita definir qué busca el o la usuario/a. Es decir, la intención de la consulta. Los algoritmos de Google crearon modelos de lenguaje para descifrar el significado y la intención de cada búsqueda. Como especialista en marketing, considera también el significado y la intención de las búsquedas de los y las clientes potenciales. Quizás debas crear tu contenido según las necesidades de quienes buscan. Un buen especialista entiende la intención y el significado de las búsquedas. Por eso es ideal crear clientes tipo (customer persona), para entender a las y los clientes.
El segundo factor clave es la relevancia de las páginas web. Es cuando el algoritmo decide qué contenido es relevante para cada búsqueda. La señal básica que indica que la información es relevante es que la página contiene las mismas palabras clave que la consulta. Una palabra clave es una o varias palabras usadas para buscar información, productos o servicios en línea. La palabra clave debe coincidir o parecerse a la de la consulta. Por ejemplo, si las palabras clave aparecen en los encabezados o en el cuerpo del texto de una página, los algoritmos pueden decidir que la página es más relevante que otras. Los algoritmos de Google ven más que palabras clave para la relevancia. Vinculan frases y temas que les pueden interesar a los y las usuarios/as. Por ejemplo, si alguien busca “perros”, es probable que no quiera una lista larga con resultados de esa palabra. También puede interesarle otros contenidos, como razas o fotos de perros. Según el tipo de búsqueda, se ven también distintos tipos de contenido relevante. Quizás es más probable que un/a usuario/a vea un video en lugar de leer textos. O quizás el contenido también incluye fotos y no solo texto.
Otro factor clave es la calidad del contenido. Como especialista en marketing debes crear contenido web de calidad. Una forma en que Google decide si el contenido es de calidad es sabiendo si hay sitios importantes con enlaces o referencias al contenido. Google usa varios factores para definir la calidad de un contenido y de un sitio web en general. Los factores no son elementos técnicos que los y las propietarios/as pueden activar o desactivar, sino aspectos que capturan el panorama general. Por ejemplo, los libros no se disfrutan solo porque están bien hechos. Además, la Búsqueda de Google recibe cierto feedback a través de un proceso de evaluación de la calidad de las búsquedas para mejorar los algoritmos usados para la clasificación.
El cuarto factor es la usabilidad de las páginas web. Los algoritmos de Google consideran la facilidad de uso del contenido. Si tienes dos páginas con exactamente el mismo contenido, la que tenga mejor experiencia de usuario/a puede clasificar mejor. Google lo llama factor de posicionamiento de experiencia de página. ¿Cómo es una mejor experiencia de usuario/a? Por ejemplo, si la página es apta para dispositivos móviles, se ve mejor en teléfonos o se carga rápidamente. Estos son algunos de los muchos factores que contribuyen al posicionamiento.
El último factor es el contexto y la configuración de usuario/a. Los
datos como su ubicación, historial de búsquedas y configuración de búsqueda
ayudan al algoritmo a ofrecer resultados relevantes y útiles. El país y la
ubicación pueden alterar los resultados. Por ejemplo, imagina que vives en
Chicago. Buscas “fútbol”. Es probable que veas resultados de fútbol americano y
los Chicago Bears. Pero si buscas “fútbol” en Londres, es probable que veas
resultados de fútbol y la Premier League. Otro aspecto de contexto interesante
que puede alterar los resultados: Google puede adaptar los resultados según la
actividad de tu cuenta de Google.
Por ejemplo, si buscas “eventos cerca de mí”, Google podría recomendarte categorías que cree que podrían interesarte. Estos sistemas se diseñaron para coincidir con los intereses, pero no para interferir en características personales delicadas.
Ahora sabes cómo funciona la Búsqueda de Google y algunos factores que los SEO consideran importantes al posicionar el contenido. Es fundamental saber esto. Recuerda los factores clave: significado de la consulta, relevancia de las páginas web, calidad del contenido, usabilidad de la página web, y contexto y configuración de usuario/a.
Fuente:Coursera – Google Marketing Digital E-Commerce.
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