Ir al contenido principal

Gasta con responsabilidad

 

Comprar algo ya se por necesidad o deseo se llama gasto, esta acción satisface necesidades personales y tiene efectos significativos en la sociedad, fomenta el crecimiento económico pero también puede afectar la calidad de vida y generar residuos, por ello es crucial practicar el consumo responsable, que busca maximizar los impactos positivos y minimizar los efectos negativos.

El consumo responsable es la actitud de cuestionar las condiciones económicas, sociales y ecológicas de un artículo o servicio, se basa en dos principios fundamentales: 

Consumir menos: Reducir la cantidad de bienes y servicios que compras para evitar los excesos. 

Consumir de manera sostenible: Escoger productos que sean respetuosos con el medio ambiente y solidarios con la sociedad. 

Además, el consumo responsable tiene 3 ejes de responsabilidad, estos son: 

Responsabilidad Personal: Implica reflexionar sobre la verdadera necesidad de comprar un producto, evitando los gastos basados en deseos. 

Responsabilidad Social: Conlleva el investigar las prácticas laborales y competitivas de las empresas, para elegir productos de calidad con precios justos. 

Responsabilidad Ambiental: Consiste en verificar el origen de los recursos utilizados en los productos, y elegir aquellos que sean respetuosos con el medio ambiente. 

El consumidor responsables es quien razona antes de comprar, analizando características como Calidad, Precio, Utilidad y Tiempo de Duración del producto o servicio, además cuida las cosas que tiene y sabe como desecharlas luego de usarlas. 

Para ser un consumidor responsable sigue estos pasos:

1. Haz una lista y decide cuánto dinero puedes gastar antes de salir de comprar para adquirir sólo lo necesario. 

2. Prefiere las tiendas locales para evitar las tentaciones de los grandes establecimientos. Hazte esta pregunta antes de realizar una compra: ¿Realmente necesito algo nuevo o es un impulso emocional?, así podrás evitar gastos innecesarios. 

3. Compara precios y la calidad de un mismo producto en diferentes tiendas y con diferentes fabricantes para hacer la mejor elección. 

4. Lee detenidamente la publicidad y las ofertas para asegurarte que sean verdaderas y valgan la pena. 

5. Reutiliza los artículos que usas con poca frecuencia para evitar comprar productos de un solo uso, por ejemplo, usa una taza o vaso reutilizable para tus bebidas en lugar de desechables. 

6. Elige productos ahorradores como focos LED y regaderas de bajo flujo para reducir tu consumo de energía y agua. 

Gastar de manera responsable implica informarse antes, durante y después de una compra para asumir los efectos personales, sociales, económicos y ecológicos que esto puede generar.

Fuente:
Fundación Carlos Slim – Manejo de dinero.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Crea el marcado de datos estructurados

  ​¿Has notado que algunos resultados de búsqueda muestran información diferente? Tal vez viste resultados con una calificación de estrellas o con precios. O tal vez una receta que se ve diferente a los demás resultados. Estos resultados únicos en el servicio se llaman resultados enriquecidos. Piensa en ellos como resultados mejorados en la Búsqueda de Google con características visuales o interactivas adicionales. Para poder tener resultados enriquecidos, debes agregar datos estructurados, es decir, un código que describe mejor el contenido web en los motores de búsqueda. El marcado de datos estructurados sirve para proporcionar información adicional legible por una máquina en una página web.

Establece los detalles de tu negocio en Google

  El panel de conocimiento de Google es una función de las páginas de resultados del motor de búsqueda de Google (SERP) que muestra información de marcas y negocios en una sección separada de los resultados de búsqueda generales. Esta lectura describe los paneles de conocimiento e indica los pasos que debes seguir para configurar los detalles de tu negocio en Google.

Seguro de Accidentes Personales Individual

  Se define como accidente (del latín accĭdens, -entis), como un suceso no planeado y no deseado que provoca un daño, lesión u otra incidencia negativa sobre un objeto o sujeto. Para tomar esta definición, se debe entender que los daños se dividen en accidentales e intencionales (o dolosos y culposos). El accidente es la consecuencia de una negligencia al tomar en cuenta los factores de riesgo o las posibles consecuencias de una acción tomada.